Si tiene su conciencia operante el presidente Calderón debe admitir que está en jaque. Su mitad Mouriño, se tambalea ante una evidencia más de defraudación nacional.
Estos siameses de los negocios al amparo de la política, deberán inevitablemente someterse en cuestión de días a una intervención quirúrgica que los va a separar. La intervención implica dejar al descubierto los tejidos enfermos que les unen. Aquí caben varias preguntas para tratar de responder cómo, cuándo, qué los unió, hasta dónde son uno sólo y quién más está con ellos.
Obviamente que la cohesión se dio en caldo de billetes y muchos, tantos como para comprar la tercera compañía petrolera más grande del mundo. ¿Podrán Televisa y su comadre Tv Azteca, cubrir con su vieja sábana el quirófano para que no se vean los gusanos que seguramente brotarán durante la operación?
Al parecer son dos divorcios los que se dan en la misma sala donde en otra mesa el PRIAN dejó de ser para volver a su origen PRI – hasta aquí te acompaño, compadre-. La bancada tricolor, experta en aguas bravas, despliega el velamen para bogar en pos de la interna de 2009 y el posible regreso al poder en 2012.
Con el ex aliado abatido y descompuesto en su propio jugo producto de la perversidad del poder, las cosas le pintan mejor para enfrentar a un PRD que pese a sus fracturas se muestra sólido.
Si las cosas continúan huracanadas dado la presión de los afanes privatizadores, el regreso de FRA a Bucareli no está descartado. Para sobrevivir, FECAL necesita continuar respaldado por quienes le llevaron a Los Pinos y algunos de estos hilos estratégicos y de peso económico fueron proporcionados por el hijo de Jamay, su operador político número uno en los momentos álgidos de 2006-2007.
Si el PAN no hace lo que hasta el momento ha sido absolutamente incapaz, es decir, política de altura con manos de seda, el barco se les va a hundir y lo peor es que el naufragio lo pagaremos todos.
Tienen en sus manos las cabezas de una familia completa que se hizo multimillonaria mientras el padrastro fue presidente. Tal vez ponerlos sobre cubierta y en la borda para arrojarlos a los tiburones pudiera calmar la furia de la tempestad mientras se avizora un puerto.
El problema aquí estriba en que se abriría con el escarmiento público otra cloaca y ello quizá acarrearía una epidemia de escorbuto por faltar el alimento fresco y de calidad para la tripulación ciudadana.
Lo que se haga tiene que ser con sabiduría y por fin con algo de ética. ¿Pueden compaginar la ética y los intereses, en las compañías nacionales, extranjeras o híbridas que pusieron a su servicio a los políticos? ¿Se les ha visto a los políticos-empresarios algún indicio de sabiduría?
Mientras se resuelven estos asuntos, el capitán del sol azteca que prestó el catalejo para ver el ciclón en toda su magnitud, antes de que se desgarrara y se rompiera la verga de la nave, se fortalece y acapara, nada nuevo, los binoculares mediáticos. Sus instrumentos; brújula y sonda, trabajan a la perfección pues lo mismo informa de bancos y aguas bajas, que de ataques filibusteros.
Así vamos, con tremendo lastre y arrastrando el ancla quien sabe hacia qué derrotero.
Las voces que piden cambio de piloto y timonel se hacen escuchar más. Con razón si ya llevamos veinticinco años a la deriva.
lunes, 10 de marzo de 2008
El envilecimiento del poder crea tempestad
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario