miércoles, 3 de agosto de 2011

En un saco todos los políticos

Como consecuencia de los frecuentes escándalos políticos que son recogidos, desmenuzados y finalmente montados en el imaginario colectivo por los medios de comunicación, a los políticos y la corrupción, en sus distintas modalidades, difícilmente se les pueden disociar.

Las agencias comunicativas que visibilizan escandalosamente, casi por lo regular con fines políticos, los casos de corrupción o cualesquier conductas extravagantes o ilícitas, cometidas por funcionarios u otros actores sociales, igualmente abren la posibilidad de generar tensión y hasta reacciones exacerbadas que pueden salir del marco legal, por lo que hay quienes desaprueban categóricamente que sean utilizados los medios de comunicación como instrumento o, dicho más claramente, como arma política.

El rechazo hacia la utilización de los sesgos que modifican los imaginarios a través de las guerras sucias o ataques mediáticos, con tono de escándalo, se basa en la consideración de que éstas constituyen fuentes de división, lo cual puede desembocar en distintas formas de violencia.

Otro de los inconvenientes que resultan de reducir la política a una especie de justa deportiva o tianguis, donde se ofertan los candidatos por medio de spots, consiste en que al ser los medios de comunicación los encargados de imponer los filtrados y maquillajes de quienes contienden en representación de las distintas corrientes ideológicas o sectores de la población, no distinguen ni mucho menos contrastan trayectorias, currículum, experiencia y demás características individuales de los candidatos a elección popular. A la hora de una campaña pagada en los medios, todos compiten por igual, se les mete en un mismo saco, dado que la mercadotecnia muestra solamente aquello que vende entre sus audiencias objeto, en lugar de aquello otro que garantizaría un desempeño más eficiente. De ahí que se tomen en cuenta principalmente factores disímbolos como los rasgos físicos, la forma de vestir, aficiones, hobbies, vida privada, u otras cuestiones de índole superficial, pero en cierta manera, decisivas.

Cuando se llega a exhibir la imagen como un producto terminado, que han elaborado los creativos y otros especialistas en marketing, los políticos ya no muestran realmente quienes son, sino lo que los asesores desean que sean o representen. Y esto generalmente diluye algunas cualidades a la vez que recompone otras. En esta tesitura puede ser más eficaz el corte de cabello o proyectar una familia unida, que una propuesta de impacto para la comunidad. Trasciende con mayor intensidad en los imaginarios un gesto o señal de religiosidad, que la exposición en segundos o minutos, de una visión objetiva, o mejores ideas y recursos para enfrentar la problemática social.


II El caso Jalisco

Los parámetros para definir el perfil de los candidatos se trastocan por la mercadotecnia. Por ejemplo, el alcalde Aristóteles, de corta trayectoria en la política y quien solamente ha ocupado un cargo de elección popular anterior al actual, (diputado local por el PRI) se encuentra mejor posicionado en los imaginarios de los electores que J.Trinidad Padilla, otro posible pre candidato del mismo partido, ex líder estudiantil, ex rector de la Universidad de Guadalajara y actual diputado federal. Esto porque el cargo le permite a Aristóteles aparecer en los medios con frecuencia.
Pese a ser cuestionado por algunos deslices e irregularidades en el ayuntamiento tapatío, mantiene su puntaje adelantado con rumbo a la gubernatura del estado. Su imagen ha tenido mucho éxito sobre todo entre la muchachada, en tanto que los jóvenes se identifican a su vez con un joven que se muestra proactivo, dinámico y con muchos deseos de ascender en su carrera política.
Ambos políticos aparecen en las redes sociales de Face book y Twitter, donde los simpatizantes que expresan sus puntos de vista van en aumento. Para continuar como puntero el todavía presidente municipal, deberá mantenerse en los reflectores mediáticos, cuidando de asear su equipo de recursos humanos. Es importante además recrear un constante activismo llevado a cabo en lugares estratégicos, donde sea más visible su aspiración.

Imaginarios y acciones a favor:

- A este aspirante se le percibe con frescura y con relativa autonomía respecto de los grupos tradicionales de las filas de su partido, ha logrado notablemente crear identidad propia. Su imagen se ve profesionalmente cuidada, al igual que el discurso breve que utiliza en las frecuentes actividades donde hay presencia de medios de comunicación. Utiliza un buen equipo de prensa que se formó y le asesora adecuadamente. No ataca a los opositores políticos, o al menos no lo hace de manera directa. Se comporta firme ante acusaciones y “malas jugadas” principalmente del gobierno estatal que intenta poner obstáculos en su camino. Pudiera decirse que se ha mantenido dentro de las reglas no escritas de la política doméstica y extiende puentes que le generan simpatías a través de actos públicos, relaciones con agentes y líderes sociales de la comunidad.

- Los juegos panamericanos le darán una extraordinaria oportunidad de proyectar su imagen, pese a que Emilo González tratará de hacer lo propio, junto con otros funcionarios y políticos de Acción Nacional.

- Las obras de pavimentación de la ciudad mejorarán el aspecto y la vialidad, al igual que el reacondicionamiento de unidades deportivas y áreas verdes del primer cuadro. El abandono de tantos años que tenían las calles más céntricas, ha sido acotado por la actual administración, lo cual seguramente le traerá buenas opiniones y votos.

- Le recientemente iniciada remodelación del pavimento que circunda la Glorieta Minerva, llevará un mes, por lo que será otro punto favorable a la imagen citadina en tiempo preelectoral. Esto si la presión que tendrá la zona logra ser desahogada de forma eficiente y no surgen contratiempos que demoren a los constructores.


Imaginarios y acciones desfavorables:

- Su juventud combinada con evidente falta de madurez política generan escepticismo en algunos sectores, principalmente entre gente adulta o en ámbitos intelectuales.

- Su equipo no presentó proyectos de largo plazo y pareciera que los trastornos ocasionados por la administración anterior en el centro de la ciudad, sobre todo la aberrante obstrucción de la Calzada Independencia con el ineficiente y riesgoso Macrobús, asfixiaron las intervenciones del actual ayuntamiento en lo referente a esta clase de obras de construcción y vialidad. Los funcionarios de Aristóteles encontraron un Ayuntamiento en total desorden y desfalco.

- La atención y conducta de este alcalde se concentró básicamente en lo político, dejando de lado propuestas atractivas en materia de cultura artística, publicaciones, promoción del empleo y autoempleo, ecología u otras. Esta actitud se puede interpretar en el imaginario de la siguiente forma: Quiso ser alcalde para ser gobernador, sin dejar de ser en ningún momento un político. Un alcalde puede ser por momentos y para el imaginario, un bombero, un policía, un boy scout, un emprendedor, un deportista, un padre de familia o un buen hijo o hermano. Nada de esto se relaciona con Jorge Aristóteles.

- Algunas señales tempranas de distanciamiento del grupo UdG, le pueden crear dificultades innecesarias.

- La violencia policíaca y de personal de reglamentos municipales contra los vendedores ambulantes en el Centro Histórico, le acarrearán seguramente enemistades y desencuentros, poco tiempo antes de las definiciones partidistas. Lo más probable es que estas acciones obedezcan a la presión de los dueños de establecimientos comerciales en esta zona. Se trata de empresarios que seguramente simpatizan con distintas opciones políticas. Y también “partícipes” de la organización de los Panamericanos, quienes tratan de “cuidar la imagen” de la ciudad.


Por su parte, Trino Padilla, tiene en su cuenta estructuras, redes y operadores prácticamente en todo el Estado. Su personalidad es de fuerte carisma, con un discurso lúcido bien articulado, que denota conocimiento meticuloso sobre temas torales de la agenda pública nacional y estatal. Se desenvuelve con naturalidad en cualquier esfera social, desde ámbitos populares, hasta cúpulas del mundo intelectual, político, artístico, empresarial y otros. Por lo que puede ser, y lo ha demostrado en los cargos anteriores, un buen interlocutor y gestor social. Su capital político por ahora permanece con bajo perfil, pero se mueve. Ha tejido bien, sin duda, este experimentado y respaldado político, por lo que seguramente lo reflejarán en breve las encuestas.


Imaginarios y acciones favorables:


- Se le percibe como un político que tiene plena conciencia de su estatus quo, es decir, ubicado en su realidad, sin ningún atisbo o aires de superioridad o poses, algo tan frecuente en la clase política actual, conformada en su mayoría por gente improvisada. Esta actitud refleja seguridad y fuerte auto estima. La sencillez legítima es una cualidad que valora bien la sociedad. Trino, como se le conoce popularmente, tiene don de gentes excepcional.

- En los círculos políticos y periodísticos, se comenta que el actual diputado federal por el distrito VIII, tiene habilidades políticas fuera de serie, se destaca como un negociador que conoce en profundidad el sistema político mexicano, tanto en las altas esferas, gracias a su cargo en la Cámara, como en el ámbito estatal, por haber sido rector y funcionario universitario.

- Sus relaciones políticas hacia otros campos como la cultura o la investigación científica, se extienden a otros países. Cuenta con dos doctorados Honoris Causae, otorgados por universidades asiáticas. Las actividades académicas universitarias de proyección internacional como la FIL, la Cátedra Julio Cortázar, etc., le permitieron por años cultivar amistades entre los que se cuentan rectores, premios Nóbel, entre otros escritores, cineastas, hombres de Estado, científicos, etcétera. Esta clase de capital político es invaluable para cualquier aspiración de alto nivel.

- Acerca del lazo sanguíneo con Raúl Padilla López, contrario a lo que expresan los corrillos, este análisis sostiene que la relación de hermanos es favorable, aunque también sea el blanco de los principales ataques de los oponentes a las aspiraciones políticas de lo que se conoce como “Grupo UdG”. La coincidencia de fuerzas de Raúl y Trino Padilla, se traducirían en consensos, lo cual cada día es más difícil lograr en el ámbito de la política, el gobierno y la administración pública. La falta de consensos genera parálisis y esto es lo que precisamente se padece con mayor agudeza entre los tres niveles de gobierno y los sectores productivos de la sociedad.

- A los entusiastas universitarios que apoyarían su candidatura, se sumarían egresados ex alumnos de las áreas de ciencias sociales, como sucede de manera natural en las relaciones maestro-alumnos.

- Mantiene buena relación con periodistas de distintos medios con quienes ha tratado a través de su carrera.


Imaginarios y acciones desfavorables:


- Las rupturas del pasado en la vida universitaria, mantienen a ciertos grupos en espera de una revancha política. La candidatura de Trino representa para éstos, un obstáculo importante para lograr sus fines.

- El apellido ligado a cargos públicos importantes durante casi dos décadas, contraviene el principio de la alternancia, considerado como base de la democracia. Esto en el imaginario social, dado que los cargos no han sido dentro de los niveles de gobierno público y tampoco, continuados.

- El liderazgo del hermano mayor y también ex rector, es percibido por sectores importantes como un poder de facto que opera de motu propio. Esta visión no tiene ningún interés en objetivarse y mucho menos destacar otros relieves que configuran este núcleo de fuerza dentro de un grupo de universitarios-políticos de distintas disciplinas o áreas, que ha logrado mantenerse organizado durante más de veinte años.

- Falta en el equipo un manejo de medios más profesional, de mayor alcance, dado que “el destape” fue percibido como algo “titubeante” que mostró tibieza, lo cual dio lugar a alguna confusión entre personas que participan o siguen de cerca el proceso político local. No hubieron ruedas de prensa formales para dar a conocer que hay una intensión legítima de contender. La oportunidad se dejó pasar, quizá con la idea de esperar a los medios una vez que alguno o varios de ellos publicaron entrevistas o notas que dieron cuenta del interés de Padilla López. Es posible que se esperaban resultados de encuestas y a partir de los mismos tomar decisiones, sin embargo, el tiempo adquiere otra dimensión en esta nueva forma de contender que se conoce como política mediática, donde no es aconsejable dejar pasar una jugada. En este sentido, todo lo que se mueva a través de los medios es positivo para la causa. No lo vieron así los asesores de imagen del equipo de Trino. Faltó contundencia para este arranque.


Para Ramiro Hernández no fue difícil anticipar sus aspiraciones, principalmente porque ha permanecido desde los años noventa dentro de los primeros círculos de la política local y en algunas ocasiones, como ahora desde el Senado de la República, ha intervenido en otras entidades, ya por disciplina ante encomiendas partidistas o por táctica personal. Es un hombre afable, con catadura de político experimentado, ligado sobre todo a la política agraria. Para algunos, su tiempo de buscar la gubernatura ya pasó, porque le tocaba contender contra Ramírez Acuña en 2000, en lugar del derrotado Jorge Arana, o ser opositor de Emilio González, quien dejó mal parado y a un paso de la justicia a un candidato poco rentable en términos de imagen pública: Arturo Zamora. Coincido en que Ramiro era la mejor opción del PRI, en ese entonces.

Imaginarios y acciones favorables

- Es muy probable que Ramiro Hernández sea la carta que tenga contemplada el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI. En primer lugar porque el éxito que ha tenido su partido para operar el retorno al gobierno federal, ofrece condiciones idóneas para que los candidatos del perfil de Ramiro Hernández logren ser mejor posicionados a través de buenas campañas y planes de medios de comunicación.

- Se trata del primer político que comenzó a buscar abiertamente la candidatura, se lo permitieron los tiempos, se lo permitió el cargo y también las redes sociales que han permanecido muy activas desde meses atrás.

- Ha realizado un buen trabajo de campo para promoverse entre diferentes círculos. En base a ello, mantiene puentes y diálogos con distintas corrientes y sectores, como la UdG.

- En caso de obtener el PRI la presidencia y el gobierno del estado de Jalisco, Ramiro trabajaría acorde con el gobierno federal, dependiendo las corrientes del propio partido que lleguen a gobernar.

- Su imagen no ha sido blanco aún de ataques importantes a través de los medios masivos.

- Puede ser una cuadro de distensión entre la lucha interna del partido, es decir, una tercera vía, aunque haya sido la primera candidatura visible, para dejar a los otros dos grupos, el de Aristóteles Sandoval y el de Trino Padilla, sin la totalidad del poder.

- Después de las extravagancias propias del estilo altanero y hasta grotesco, con que gobierna pese a todo, Emilio González, la sociedad pondrá los ojos en una personalidad mesurada, pacífica y sobre todo mentalmente sana. Estas cualidades tiene Ramiro Hernández, de acuerdo a la teoría de los imaginarios utilizada en el presente análisis.

- La permanente lucha que libra la universidad contra los gobiernos en turno, aunque en más de un aspecto es benéfica para la sociedad, en los terrenos del marketing político no representa buena oferta. En este punto cabe señalar que la “batalla mediática” que tuvo lugar el año pasado entre la universidad y el gobierno del estado, -misma que bajó de intensidad pero aún persiste- causó hartazgo y efectos contrarios, diría estragos, a la imagen de ambas instituciones, y tal vez la UdG, llevó la peor parte. Esto por no haber elegido otras estrategias, mediáticas o no, que hubiesen esquivado el desgaste ante el público. Habrá que ver en qué medida el tiempo se ha encargado de que se separe (disocie) esta mala película del imaginario. La guerra de basura que preparan los asesores de medios de las respectivas “comandancias” partidistas, seguramente lo van a reflotar.

- Si los asesores de imagen y comunicación que se cuentan en el equipo de Ramiro Hernández, logran bajar y extender a la sociedad el imaginario expuesto en párrafos anteriores, el seguro precandidato cobrará un impulso muy importante. La tarea consiste en imprimir en varios imaginarios que “Ramiro es el gobernante que la sociedad necesita porque se comporta de tal manera que habrá un ciclo tranquilo como es su personalidad”.


Imaginarios y acciones desfavorables:


- Su imagen evidencia que no ha sido trabajada por expertos en comunicación o en técnicas que son indispensables para “existir o verse”, en la mayor parte de la sociedad que supuestamente va a acudir a las urnas. Los medios de comunicación son el lugar donde se construye el poder. Más allá de reunirse con periodistas y asistir a los programas, además de las redes de Facebook, no existe un trabajo profesional de medios realizado por su equipo. Su discurso es monótono, no ofrece variedad de tópicos, no proyecta dominio de temas ajenos a la política local e invariablemente opina desde la perspectiva de su partido. Se le ve encasillado en dinámicas que reflejan reminiscencias de épocas anteriores.

- No conecta de manera natural con la gente o con cierta clase de gente que es el groso del electorado potencial, pese a tantos años en cargos políticamente visibles.

- El aprendizaje para desenvolverse en los medios, y una óptima instalación en los imaginarios, llevaría tiempo y dinero. Tiene a su favor la estructura y las cúpulas del partido, sin embargo la opinión pública no le favorece casi en absoluto. Necesita su imagen un trabajo fino de ingeniería.

- El último punto en contra es de carácter político y depende en parte también de la candidatura de la oposición que ahora es gobierno. Esto se resolverá desde la capital del país, como ha sucedido en otros tiempos. Si el acomodo de piezas, las decisiones, no favorecen al grupo UdG, es decir, la candidatura de Trino, ahora que se ha enrutado rumbo a la gubernatura, el grupo que encabeza su hermano pudiera inclinar la balanza a favor del candidato del PAN, y el disminuido PRD. En este caso TPL buscaría ser postulado para el Senado y el PRI no recuperaría Jalisco. Así de compleja puede ser en ocasiones la política.

El siguiente apunte se ocupará del resto de partidos y candidatos que se vayan sumando a la contienda política.


2011-08-03

Recibí algunos correos que me instaron a continuar con estas reflexiones, por lo que me permito dar entonces algunos otros puntos de vista sobre el resto de aspirantes a encabezar el próximo gobierno jalisciense.


Enrique Alfaro


Su nombre aparece en la opinión pública, a partir de su elección plurinominal por el PRD, como diputado local, cargo que obtuvo de la mano del grupo UdG.
Por este mismo camino y apoyos, llegó a la presidencia de Tlajomulco, municipio de la Zona Metropolitana que es del dominio público que ha sido un botín de políticos de los tres partidos mayoritarios: PRI, PAN, PRD. (En contubernio con los empresarios fraccionadotes y especuladores de toda laya) Entre los ciudadanos que hasta ahora han manifestado interés en contender por la candidatura de sus respectivos partidos, Enrique Alfaro es el que tiene menos posibilidades de lograr esta meta.
Su primera acción política consistió en romper con el grupo universidad, haciendo declaraciones severas en contra de su principal líder. El motivo de la ruptura es de sobra conocido: él finalmente hizo su propia planilla, desoyendo sugerencias o acuerdos previos. Su capital político se basa en cuadros que por años han tratado de disputar el poder a Raúl Padilla, la mayoría de los cuales también forman parte del equipo de Andrés Manuel López Obrador en la entidad.
El antipadillismo y el lopezobradorismo se encontraron en Jalisco. Los operadores de AMLO que participan como locales, se encargan de que las huestes que sean afines a López Obrador sean a su vez contrarias al grupo UdG y su líder Padilla. Es improbable que AMLO convenga en esta circunstancia creada por sus colaboradores, pero se la imponen.
El capital económico que respalda a Alfaro, ha sido asociado con desarrolladores de inmobiliarios y empresarios instalados en el municipio, con quienes ha hecho al menos un negocio. Por este motivo y por el famoso viaje a Cuba en plan de celebración de juniors, su imagen de gobernante sufrió un revés. Pese a todo esto, el empeño de seguir rumbo al cargo de gobernador lo hace moverse en los medios y donde encuentra lugar, logrando cierta posición.
Es claro que Alfaro juega todo su capital en esta apuesta. De manera temeraria, inclusive. Solamente la cada día más remota posibilidad de que Andrés Manuel se convierta en presidente de México, le pudiera abrir los espacios necesarios para continuar una trayectoria ascendente en la política y la administración pública. Aunque esta circunstancia también pudiera ser dudosa, puesto que hasta donde se conoce de la personalidad del tabasqueño, éste no es simpatizante de que la gente se haga de fortunas de la noche a la mañana gracias al poder que ofrecen los cargos públicos. El hijo del ex rector del mismo nombre y apellido, es todo un caso.


Imaginarios y acciones favorables:


- Se rodea de un equipo profesional de técnicos que conocen muy bien sus respectivas áreas. Hay un permanente diálogo entre los funcionarios y los gobernados, aunque muchas veces se ven rebasados por la problemática que se eleva de manera alarmante. Los latrocinios de las empresas constructoras y los anteriores administradores, dejaron a miles de familias estafadas o enfrentadas a riesgos de toda clase, principalmente inundaciones. Alfaro ha desempeñado una administración más transparente.

- El asunto del Aeropuerto le trajo simpatías. (La nueva administración privada se negaba al pago de impuestos, algo tan común en la I P mexicana)

- Logró acercarse a AMLO, uno de los políticos más destacados de las últimas décadas y ser uno de sus representantes en la entidad.

- Se ganó el apoyo de personas respetables, que gozan de un buen prestigio, como Estéban Garaiz y Enrique Ibarra.


Imaginarios y acciones desfavorables:


- Pese a que López Obrador es el político mejor posicionado a nivel nacional por parte de los grupos opositores al régimen PRI-PAN, en Jalisco, estado que se reconoce conservador, no cuenta con un número importante de simpatizantes, como para ser significativo en el momento de las elecciones. Alfaro es del equipo del López Obrador en Jalisco, por lo que tendrá la misma suerte que él. No hay, entonces muchas expectativas.
- La forma de encarar el conflicto con el grupo UdG, utilizando violencia verbal, denotó una personalidad proclive a los enfrentamientos. Su actitud fue autoritaria e incluso soberbia. La sociedad da la espalda a estos individuos.

Faltaría un análisis sobre los políticos de Acción Nacional que manifiesten interés en presentarse a las elecciones del 2012. Entre ellos pueden ser ya mencionados Alfonso Petersen y Fernando Guzmán. No hay señalas claras en este cuartel

Por el PRD tampoco hay señales de mayor actividad y pudiera ser que la dirigencia de este instituto se incline por un candidato ciudadano o algún político en busca de patrocinadores, como Fernando Garza. Ya existe algún indicio.

jueves, 28 de julio de 2011

Será Josefina Vázquez Mota

Si la cúpula del PAN no se equivoca, aunque suelen hacerlo, el capital político que es capaz de salvarles de la anunciada derrota y salida de la Presidencia de la República, es el que acumula en forma creciente la diputada por la LXI Legislatura, Josefina Vázquez Mota.

No hay otra candidatura de esta institución política capaz de remontar algunos factores más que visibles: Por una parte se tienen los magros resultados de dos sexenios que no lograron reflotar la economía, al igual que tampoco trazar un rumbo y mucho menos planificar o siquiera hacer un esbozo legible de cómo se pensaba el desarrollo, y por la otra, la imposibilidad de conectar con la gente, esa falta de entendimiento sobre las raigambres antropológicas e imaginarios múltiples, de este mosaico socio cultural que llamamos México. El panismo, como corriente ideológica, no ha sido el interlocutor sensibilizado ante el pueblo que permanece gravemente dividido, agraviado y atrasado. Lo ve en todo caso como un rebaño lastimoso, al que es necesario cuidar del mal, así como guiarlo sobre todo espiritualmente, y ponerlo a trabajar, lo cual no estaría mal si no fuese porque lo pretende hacer exclusivamente a través de la imposición del modelo neoliberal a ultranza, mismo que ha sido declarado en distintos foros mundiales como causante de las agudas crisis financieras y quiebras que, de manera constante, se repiten por el mundo.
Las sociedades se han convertido en fábricas de pobres y desempleados, por lo que, o se abandonan estas aguas turbulentas o nos precipitan a otros niveles de violencia e ingobernabilidad, que pudieran desatar situaciones aún más caóticas y cruentas, como ha sucedido en el pasado aquí y en el presente en otras latitudes.

Sería interesante conocer la opinión que tiene al respecto la política y empresaria Josefina Vázquez Mota, de quien su formación académica refleja una fuerte vocación por la libre empresa, en sus aspectos finos de liderazgo, competitividad, eficiencia, entre otros campos de la iniciativa privada. Ha fungido como asesora de corporativos de alto nivel y su desempeño en la administración pública en gobiernos con visión empresarial y fuertemente asidos al Consejo de Washington, es incuestionablemente positivo para las causas de los grupos con los cuales mantiene sinergia y comparte objetivos e ideales. Que yo recuerde, en medio siglo no ha habido otro funcionario que repita algún cargo del gabinete en dos sexenios continuados, desde Antonio Ortíz Mena al frente del Banco de México. Además, JVM, ha salido muy bien librada de los roces que por naturaleza tiene la política. Y vaya que enfrentó gente del calado de Elba Esther Gordillo. Nada más y nada menos. Es hábil y tiene otra cualidad que me comentó un amigo que ha llegado a conversar con ella sobre temas de la agenda nacional: sabe dialogar.

Por supuesto que también el gran electorado que estará presente en 2012, toma en cuenta la desatada furia de Calderón contra un enemigo ubicuo, una persecución que si bien ha servido para darnos cuenta de la capacidad de fuego que tiene la delincuencia, conformada por batallones de individuos que perdieron todo indicio de escrúpulos o moral, no convence en cuanto a que los esfuerzos y sacrificios de por medio, al menos cristalicen en una nación más liberada de esta clase de organizaciones criminales. Por el contrario, éstas se multiplican y aparecen con nuevos nombres y mensajes siniestros.

Aunque efectivamente hay quienes respaldan o apoyan lo que ha sido la impronta del sexenio, es decir, gente convencida de que el mandatario hace lo correcto al continuar con esta “lucha o guerra”, como parte del llamado Plan Mérida, hay mucho más que lo perciben distinto; rechazan categóricamente las medidas militaristas y policiales. El sentido común predominante entre ámbitos mejor formados e informados, se orienta hacia otra clase de políticas públicas o acciones para mitigar y finalmente revertir, el derrumbamiento social que padecemos. Estas entidades ofrecen como alternativas viables, elevar de manera sustantiva la inversión en educación, así como aplicar programas que incentiven oportunidades a los jóvenes, entre muchas otras ideas. La no violencia es también la bandera de una sociedad civil que parece despertar y más vale que se le tome, ahora si, en cuenta. También sería importante saber el punto de vista de Josefina en esta asignatura.

Considero que uno de los momentos clave de su búsqueda legítima de ser la presidenta de México, será cuando se pronuncie sobre este tema en particular. Difícilmente pudiera pensarse que Vázquez Mota pusiera la mayor parte de la energía que dispone el Estado para perseguir al crimen organizado, como lo hace Calderón. Difícil es también pensar que los grupos de interés detrás de todo este aparato bélico, judicial y financiero, dejen el negocio. Sin embargo, el país no puede y no debe continuar por este rumbo.

Por ahí va de boca en boca una pregunta que me parece un tanto vacía o fuera de contexto: ¿Está México preparado para tener una presidenta? Yo considero que las sociedades no se preparan en función de ser gobernadas por tal o cual género. No existen parámetros para sondear o medir opinión en ese sentido. Mucho menos hay puntos de apoyo para sostener semejante cuestión. El hecho de que en determinado momento histórico o coyuntura política surja un liderazgo encarnado en una mujer, no va necesariamente ligado a algún tipo de preparación cívica en particular, ya sea psicológica, moral o de cualquier índole, que abarque a la sociedad en su amplio conjunto. Esta idea es por decir lo menos desfasada, se trata de un imaginario que no tiene peso ni trascendencia en un proceso político. Aunque se dibuje la caricatura de un país predominantemente controlado por hombres de cultura machista.

Varias naciones latinoamericanas que tienen bastante semejanzas y hasta analogías histórico-culturales, han experimentado presidencias dirigidas por mujeres y según lo que es posible observar en toda la gama de indicadores, han sido más que eficientes.

Lo que es más fácil suponer es que la condición de mujer será un punto clave a favor. El voto femenino puede venir desde fuera de las fronteras de la propia militancia del PAN. Esto lo deben tener en cuenta los posibles oponentes.

Y, por otra parte, algo que pudiera eventualmente complicar las simpatías hacia su perfil político, sería enarbolar el conservadurismo un tanto extremo, que caracteriza a la corriente ideológica de pertenencia. Una postura más receptiva hacia las distintas maneras de pensar y comportarse en la sociedad, donde se manifieste pluralidad y reconocimiento por las diferencias, en lugar de tolerancia o intolerancia, sería recomendable. En este aspecto los asesores de comunicación, imagen e ingeniería electoral, tendrán que demostrar toda la destreza posible. Sería entonces necesario trazar rumbos originales que incluyan otra forma de llevar a cabo el arte de gobernar y sobre todo acorde a nuestra topografía y tipología política y social. Coincido con la polítóloga Chantal Moufe, quien se pronuncia por la poliarquía y la presencia del conflicto en las democracias modernas, en lugar de las visiones omnímodas y/o sesgadas que pretenden imponer estilos de vida e ideales unilaterales, todos esos imaginarios nucleados en una religión, secta o en el peor de los casos, como el nuestro, sometidos a los lobbies internos y externos que cuidan intereses muy específicos que nada tienen que ver con el proceso de la nación, así mismo los poderes fácticos que se vuelven cada día más difíciles de controlar.

No hay problema alguno en que gobierne una mujer a un país en desarrollo, con fuertes retrasos sociales y elevados índices de marginalidad y delincuencia. Como sucede en la mayor parte de los países de América Latina. Por el contrario, las gestiones realizadas permiten apreciar cambios favorables.
Si los votantes inclinan el triunfo electoral a favor de Josefina Vázquez Mota, la incluirían en la lista de mujeres que han presidido naciones latinoamericanas:

- Violeta Barrios de Chamorro (Nicaragua: 1990-1997)
- Mireya Elisa Moscoso de Arias (Panamá: 1999-2004)
- Michelle Bachelet (Chile: 2006-2010
- Cristina Fernández de Kirchner (Argentina: 2007- en funciones)
- Laura Chinchilla (Costa Rica: 2010- en funciones
- Dilma Rousseff (Brasil 2011, en funciones)

Nicaragua, Panamá, Chile, Argentina, Costa Rica y Brasil son los únicos países donde se ha logrado satisfactoriamente llevar a una mujer al poder por medios democráticos.
Esto no significa que no hayan sido meritorias las gestiones de otras mujeres que de manera interina, por herencia o inercia política también han llegado a representar a sus países al ascender a la Primera Magistratura. Se trata de los casos de María Estela Martínez de Perón (Isabelita) quien gobernó Argentina de 1974 a 1979, después de la muerte de su esposo y presidente Juan Perón.
Enseguida fue la boliviana Lydia Gueiler Tejada, quien mantuvo el cargo entre 1979 y 1980. Posteriormente llegó el turno para Haití con Ertha Pascal Trouillot como primera ministra, posteriormente Janet Jagan quien gobernó la Guyana entre 1997 y 1999 y finalmente Sila María Calderón, quien se convirtió en la primera presidenta elegida de Puerto Rico. En este grupo se incluye a Rosalía Arteaga, quien gobernó durante dos días en Ecuador en 1997. Ella había ocupado la vicepresidencia en la administración de Abdala Bucaram, el cual fue destituido de su cargo por supuesta o real incapacidad mental para gobernar, de manera que Arteaga, amparándose en la constitución de su país, se convirtió en presidente.

Josefina Vázquez Mota sin duda es el mejor cuadro político del PAN, y será una fuerte opositora para cualquier candidato de los partidos que contenderán en 2012. Su presencia en las elecciones federales como aspirante a la primera magistratura, será también un ingrediente valioso para lo que pretende la democracia en nuestro país.

miércoles, 6 de julio de 2011

¿Qué pasa en México?

Algo extraño y fatal sucede en México, además de tanta fatalidad que cuesta, realmente mucho, describir. Palabras como “inaudito”, “insólito”, “depravado”, “demencial”, brutalidad, infamia, mezquindad, no ajustan ya para dar una aproximación lingüística a los colmos que son lo cotidiano en esta sociedad, harta de ser víctima y a la vez apoltronada en sus nichos de confort y distracciones pueriles. Vaya paradoja.

Es muy difícil refutar la tesis de que cada vez que votamos lo hacemos para que las cosas empeoren, aunque esa no es nuestra intensión, sino todo lo contrario. Ya son varios sexenios al hilo, recuerdo cuando menos unos cinco, en que cada gabinete entrante supera al anterior en dislates, errores, pifias o de plano desastres, como el de ahora. ¿Sirven para otra cosa que para infundir caos, miedo, desconfianza y desánimo, los gobiernos federales, muchos estatales y miles de municipales? No, para nada más han servido en décadas.

La mayor parte de la infraestructura que vemos, como carreteras, puentes, puertos, aeropuertos, refinerías, etcétera, ya son de muy atrás, salvo una que otra autopista de cuota, pero este rubro ya está concesionado a particulares, de manera que no obstante que los políticos se pongan el sombrero de que las obras se deben a sus “esfuerzos”, las construyen empresas y ellas mismas las explotan. Por cierto el gobierno de Calderón gasta millonadas en presumir estas mentiras en los medios. No son actos de gobierno. Los aeropuertos, puertos y lo poco que dejaron los gobiernos del ferrocarril, esa chatarra que vemos rodar, se vendieron a la iniciativa privada, inclusive a una empresa yanqui de la cual el ex gobernante Zedillo es accionista. Además, los agentes del gobierno que hicieron las transacciones, encima de sus sueldos y prestaciones insultantes, se llevaron una buena tajada, como se dice coloquialmente en este país.

Los sucesivos gobiernos reactivan las divisiones históricas de la sociedad, le esquilman una parte considerable del producto de su trabajo, se confabulan para arrasar con los pocos reductos naturales que se conservan, como son algunos bosques, manantiales y selvas, mismos que se pierden de una manera desenfrenada.

Dejaron la comunicación masiva, lo más estratégico de toda la sociedad, en manos de clanes familiares que dominan este mercado y lo que produce, es decir información o mensajes con sesgo ideológico cargado hacia la oligarquía y que son capaces de hacer cognición en los imaginarios colectivos y con ello dirigir comportamientos políticos u otros. Todo esto sumado a la proliferación de contenidos que instilan conductas consumistas a su vez compulsivas. Medios anodinos, tendenciosos, antidemocráticos y fuertemente monopolistas.

La corrupción desmedida de los gobiernos y todo lo que gravita en ellos, incluida una buena parte de la iniciativa privada, también dio lugar a que ingresen al país miles de toneladas de armas ligeras y no tan ligeras, casi de toda clase y calibre. En lo que redacto estas páginas ya surtieron varios pedidos millonarios en distintos sitios del país. Son para matar, secuestrar, asaltar, atracar a punta de balazos, es tan exagerada esta situación que hasta la propia SEDENA proporciona pistolas tipo escuadra para autodefensa del hogar ¿Qué vislumbran los que tienen acceso a cierta clase de información?

Antes de llegar a esta encrucijada de terror, los gobiernos y sus secuaces se pusieron de acuerdo para abrir las fronteras y permitir el ingreso de productos, la mayoría procedentes del oriente, a precios y calidad por debajo de los nacionales: calzado, textiles, utensilios y hasta alimentos o especies como el chile, sin duda transgénicos.

Se abrieron más las fronteras del norte, pero solamente de allá hacia acá y para los automóviles con más de diez años de uso. El parque vehicular se disparó en todo el país, con la consecuente saturación de carreteras y ciudades, incremento de accidentes, quema de combustible, saturación de chatarra, llantas viejas, etc. Los transportes públicos urbanos se fueron a la baja en cuanto a oferta y calidad de servicios, excepto en la capital.

Endosaron las minas a compañías extranjeras, los bosques, las playas y hasta el agua del subsuelo, para que se beneficie la coca cola o las cervecerías, ahora con capital extranjero. Expropiaron a las comunidades y vendieron la franja del Istmo de Tehuantepec (véase La saga de Tehuantepec. www.carlosvillaguzman.blogspot.com) a las trasnacionales, como algunas españolas que construyen parques eólicos para vendernos electricidad. ¿Por qué cree usted que encarcelaron, asesinaron o desaparecieron tanta gente en Oaxaca? Eran en su mayoría líderes indígenas o civiles comunes que protestaban contra los ingentes abusos y atropellos que constantemente les ocasiona el gobierno a través de sus instituciones armadas o políticas. Después se vino lo de la APPO y luego a ver qué sigue.

Esa misma secuencia de gobiernos descuidó áreas litorales, por lo que se perdió hace poco la isla Clipperton, adueñada definitivamente por los franceses. (Fuente: http://www.cityacapulco.com.mx/notic...lipperton.html) además de permitir la entrada de buques pesqueros, por falta de vigilancia, para que depreden a su antojo las millas náuticas nacionales.

Por si fuera poco lo que abarca ésta lista incompleta, los gobiernos que hemos padecido, introducen y obligan a la gente a vacunarse con altos riesgos contra la salud, todo para complacer a la siniestra industria farmacéutica, ahora global.

Qué difícil va a ser ir a votar otra vez por un gobierno. Y cabe decir también que no he cambiado de opinión desde hace cinco años cuando elegí como presidente a Andrés Manuel López Obrador. Espero que se den las condiciones para que vuelva a postularse y nuevamente cruzaré la papeleta con su nombre. Lo comparo con Lula, a quien las mafias de su país le impidieron llegar en varias ocasiones a la presidencia, los del grupo Globo insistían en que “ese señor era un peligro para Brasil”, hasta que gracias a la gente que le apoyó, pudo erigirse como mandatario y en ocho años, lo que duraron sus dos periodos de gobierno, ya que se permite la reelección, fueron suficientes para transformar a este gigante hasta posicionarse como la cuarta economía mundial y la mayor de América del Sur. Por eso en su reciente visita este presidente se sintió con autoridad moral para hacer algunas críticas puntuales sobre lo que acaece en México y hasta ofreció ideas, sugirió alianzas con Pemex, entre otros comentarios y observaciones. Por cierto se permitió desearle suerte a Encinas quien fuera literalmente barrido por la aplanadora oficial y la propaganda en las elecciones del domingo.

En cambio, las mafias de aquí y mucha gente todavía bajo los influjos de la televisión o de otra clase de efluvios mentales o reales, no lo ve de esta manera y todavía es capaz de negarle el voto al tabasqueño. Es comprensible mas no justificable, la falta de esfuerzo o voluntad para informarse más a fondo sobre las opciones políticas y que muchos sean influenciados a tales niveles por los medios, sin embargo, esta actitud es la menos indicada entre tanta fatalidad. ¿O hay otro precandidato libre de toda culpa?, AMLO puede significar la única salida, aunque traten de desaforarlo de nuevo.

Si llego a ver a Salinas en la cárcel y sin la fortuna que hurtó, lo mismo que a sus sucesores enfrentando la ley, nuevamente les inculcaré a mis hijos y alumnos el amor a la Patria, porque hasta eso se ha perdido.

Esta esperanza sólo es posible cristalizarla a través de un gobierno que proponga y realice, desde la raíz, un cambio.

sábado, 2 de julio de 2011

¿Qué condiciones guarda el Estado en México?

Por Carlos A. Villa

Las razones de ser del Estado consisten en garantizar a la sociedad los marcos jurídicos y las bases legales, entre otras atribuciones, para que ésta se desenvuelva plenamente en ejercicio de sus derechos, capacidades y competencias. De esta forma el Estado fomenta un desarrollo más armonioso y justo, al igual que facilita formas de gobierno y de convivencia acordes con este fin, como lo es la democracia. El Estado provee bienes y servicios básicos a la sociedad a la vez que regula la economía y las actividades en todos los órdenes de la vida pública, administra la justicia, protege el territorio y controla o rige las fuerzas armadas.

Cuando el Estado deja de cumplir con estas funciones comienza a debilitarse y cae en descrédito. Más aún, cuando el Estado abandona su misión y se vuelve contra la sociedad por haberse vinculado o caído en manos de individuos o grupos ajenos a su naturaleza, como son los poderes fácticos, se autodestruye. Cuando el Estado no ofrece garantías a la sociedad en términos de legalidad, lo que se conoce como Estado de Derecho, la expone al peligro. Cuando el Estado ha sucumbido mediante mecanismos como el soborno, a los intereses sesgados de ciertos grupos, inclusive extranjeros, pierde su razón de ser.

Todo esto ha sucedido en México y evidentemente nos da indicios para pensar en que efectivamente se terminó el Estado, o al menos las razones que lo sustentan, la mayoría ni nos hemos enterado. Ahora mismo se presentan dos casos que pueden servir de ejemplo de todo lo anterior. Precisamente se manifiestan de dos formas que nos ayudan a comparar y más o menos hacer un dictamen sobre lo que sucede hoy al pasar la mitad del 2011. Se trata de un hecho de impacto nacional y otro estatal. Ambos sirven de muestra por los niveles de contundencia que no dejan lugar a dudas.


El primero de ellos son las declaraciones de Elba Esther Gordillo, quien sin más desnudó verdades que no se conocían del todo o no se tenía la certeza: vergonzantes, siniestras. Una estampa cruda de lo que es la política en este país o mejor dicho, lo que son ciertos políticos, muchos de ellos, la mayoría quizá, comenzando por el presidente que, para llegar a serlo, se sometió a la oscura voluntad de la líder sindical.
Y es líder de maestros, lo cual enseña la categoría, los niveles de éstos que se pastorean con tanta facilidad como inconscientes borregos. Son ellos los que sostienen con parte del salario el imperio degenerado, porque así se auto confesó, por ser capaz de sobornar, traicionar, venderse al mejor postor, pactar ganancias, parcelas de poder donde es posible exprimir en términos de cargos públicos, comisiones, dividendos de todo tipo. Elba Esther dejó claro en qué consiste su actividad, un pragmatismo que puede mover a su conveniencia las aspas del molino que es la política de este país. Ella vende o trueca, para decirlo con mayor exactitud, fuerza electoral, así de simple, a cualquier partido o movimiento de trascendencia nacional. Tiene el fiel de la balanza, lo saben los demás y se someten. ¿Cómo llegó a tanto aquella “flaca” extrovertida que le simpatizó a López Portillo, durante un acto de maestros?

¿Cómo se puede explicar que la fuerza de uno de los personajes más controvertidos, cuestionables y determinantes para las causas torcidas y antidemocráticas que se están imponiendo entre los círculos políticos, proviene del magisterio? Qué revoltijo es todo esto, sin duda.

Los educadores de nuestros hijos (por eso han proliferado tanto las escuelas privadas) manipulados y utilizados para sostener una estructura que asfixia no tan sólo a la educación, entendida como proyectos vanguardistas o al menos actualizados sobre el proceso enseñanza-aprendizaje y práctica de los conocimientos, sino que se presta de forma mercenaria para asegurar triunfos de candidatos sin importar la filiación y los principios ideológicos, vaya, sin tomar en cuenta lo que le puede suceder al país por ser llevados los hilos de su conducción a la guaridas del hampa. Aquí ya no tiene ningún sentido educar, ni gobernar, ni el Estado ni nada.

Y, asómbrese, de la misma forma en que manejó al actual mandatario, permitiéndole así que fuera presidente, aunque nada más fuese como figura decorativa que no tiene empacho en disfrazarse de lo que sea, sobre todo de militar, también da instrucciones en las agendas de varios gobernadores. Un poder inmenso, fáctico, depravado, porque corrompe hasta la médula del proceso democrático mexicano, mismo que gracias a estas corrientes golpistas se ha quedado estancado y hasta huele mal.
¿Qué clase de Estado es este, existe realmente como tal?

El otro caso es local, se ubica en Jalisco, se ha publicitado cada día desde que alguien lo sacó a la luz. El atraco de 9.5 millones de pesos del erario que realizó el contralor y su posterior exoneración, por parte de las facciones del PRD y PRI en el Congreso del Estado, arguyendo razones que rayan en lo ridículo. Estos actores sociales: contralor, diputados y otros políticos en activo o en la congeladora, le dicen de forma precisa a la sociedad que están para burlarse de todos, porque la burla es parte de su actividad como individuos sedientos de dinero, poder, lo que sea, a cualquier precio, siempre y cuando no lo pague su bolsillo. Ser parte de la administración pública o del gobierno, para ellos equivale a tener una especie de “patente de corso” que les permite impunemente el saqueo del dinero público.
En lugar de sacrificar esta pieza podrida y caminar con mejor imagen hacia las elecciones, las facciones coludidas le pasaron por encima a la opinión pública, les importó un bledo el qué dirán, y dejaron muy grande la posibilidad del blanquiazul para continuar en Casa Jalisco.

Ya iban muy avanzados, pero quizá les ganó la ambición o el miedo de que la caída de Godoy jalara hilos comprometedores que pudieran hacer rodar varias cabezas. Como sea, el panorama no es para nada aseado, al contrario. El ejercicio de la política nacional y regional se desorientó, se fue por otros rumbos alejados de lo social, en términos de conceder importancia a las bases y al juego político en si, El interés económico bajo la visión individualista del capitalismo a ultranza, absorbió todo lo demás, hasta al propio Estado. Y no fue un asunto de moral, sino de política y sobre todo de políticos.

lunes, 27 de junio de 2011

¿Por qué marcha la gente?: Algunas reflexiones sobre los liderazgos espontáneos que surgen de una sociedad en crisis.

La mayoría de las personas jamás ha participado en una marcha. Este dato no requiere cifras para ser admitido. Basta con preguntarse a sí mismo y responder: cuándo, por qué y junto a quién se marchó. ¿Hasta qué punto somos todavía el zôon politikón aristotélico?

Hace unos días alguien expresó el siguiente comentario: “En México, hay 45 mil muertos y nadie asoma a la calle, en cambio, en Argentina hay un muerto y todo mundo sale a marchar”.
Tal vez solamente se trate de una opinión exagerada, sin mayor fundamento, mas no podemos regatearle algo de verdad en cuanto a la forma como reacciona la gente de distinto contexto sociohistórico y geográfico, ante acontecimientos cuyo sentido o la coyuntura en que se presentan, los hace trascender hacia el espacio público. Aún dentro del propio territorio nacional pueden darse formas distintas de respuesta, dado que éste también es un mosaico de variables socioculturales. De acuerdo con Castells, (2010) “La dominación y la resistencia a la dominación cambian de carácter según la estructura social específica en la que se originan y que modifica su acción.”

Se tiene la idea de que en dicha nación sudamericana, es casi como una tradición que las personas adquieran el estatus de ciudadanos en la medida en que tienen conciencia de sus derechos y de la forma en que es necesario actuar cuando éstos son sometidos a voluntades que les superan en recursos de una manera sofocante o hasta tiránica. Nos enteramos por diferentes medios, que la población reconoce (aunque no toda desde luego) porque lo ha sufrido la mayoría de distinta manera, que la única forma de recobrar las prácticas democráticas, aunque solamente sea para sobrevivir, se encuentra en la capacidad de respuesta unificada, es decir, en base a grupos numerosos de individuos que cierran filas, no tan sólo en las calles al salir formando contingentes que dan nuevo significado al acto de presencia, sino que también en las múltiples formas de pensar o ideologías que convergen en el imaginario colectivo. De esta forma fueron logrados los consensos determinantes para el cambio. Éstos sacudieron a la última dictadura militar al costo de terribles y multitudinarios sacrificios, la cifra reconocida oficialmente es de alrededor de 35 mil víctimas entre desaparecidos y muertos. También tuvieron que ver en esta liberación las altas dosis de trabajo intelectual, así como el ingenio y el empuje social con la creatividad que le es inherente al pueblo, sobre todo cuando se le expone a situaciones extremas.

Es importante también señalar que la correlación de fuerzas del mundo capitalista así lo convino, lo aceptó y finalmente lo impulsó. Si no hubiese sido así, los militares tal vez continuarían en el poder, además muchos argentinos estarían conformes con ello. Es frecuente escuchar expresiones en este sentido, principalmente entre las clases media y alta.

La salida del proceso, que es como se conoce a esta etapa, como si se tratara de una lección depuradora, una especie de criba ideológica y política, dio lugar a una forma de democracia que si bien no cristaliza como tal, en términos del canon que señala un auténtico poder ciudadano, al menos da muestras tangibles de inclusión social y medidas redistributivas a través de políticas públicas pensionarias, educativas, comunicativas u otras. Y por supuesto que el desenvolvimiento de las acciones reiteradamente, aunque no como regla establecida, guarda proporción directa con las pautas y los tiempos electorales, siendo esta práctica uno de los vicios que de forma inercial padecen las democracias en vías de formación: las políticas electoreras.

Debido en parte a que persisten las disfunciones y desajustes propios de un modelo de gobierno que aún permanece en su etapa de pruebas, todavía atravesado por los corporativos financieros y empresariales que operan a su vez dentro del concierto neoliberal, además políticamente enfrentado a las contradicciones de origen que subyacen dentro de una de las principales matrices ideológicas, el “peronismo”, y también porque se dieron las condiciones que favorecen la incorporación ciudadana a la esfera pública, se formó una sociedad más activa y participativa políticamente, aunque todavía guarda resistencias y miedos profundos.

La protesta social argentina muchas veces es definida con el estigma aplicado a las dinámicas con tintes corporativistas y populistas que, bajo el calificativo de “movimientos piqueteros”, ha sido constantemente objeto de crítica por parte de actores que ven en ello una forma acostumbrada de comprar voluntades a los líderes que se especializan en organizar y encabezar marchas, las cuales por lo regular terminan en catarsis colectivas, o en un discrecional reparto de “ayudas”. De esta forma es como se consigue apaciguar la inconformidad permitiéndose dichos líderes, entre otras facultades que incrementan sus ingresos o los posicionan con mejores expectativas políticas, elevar los decibeles de las calles y enfurecer a los automovilistas.

Con esta estrategia se disipan fuerzas entre dominadores y dominados, o para expresarlo sin caer en una visión dicotómica, entre grupos de sujetos con distintos márgenes de acción y representatividad que se traslapan dentro del ámbito nacional y cuyos intereses, como en cualquier sociedad, forcejean entre sí por ser diferentes o francamente contrapuestos. Sin embargo, al parecer son los mismos intereses los que enfrentan a los sujetos o grupos, según lo que más comúnmente es posible observar. Si los intereses fuesen auténticamente distintos tal vez el conflicto fuera menor. Precisamente la lucha por los mismos objetos, es lo que mantiene a la sociedad en permanente tensión. Esto es, la mayoría busca mayor y más fácil acceso a la posesión y el consumo de bienes materiales, máxime cuando el auge electrónico de la comunicación se especializa en provocar o exacerbar estas reacciones, lo cual antepone sobre cualquier otro móvil de carácter ideológico, moral, solidario, etcétera. Reflexionar sobre ello nos remite a los andamiajes de la teoría social, la filosofía política o los estudios socioculturales, en sus diferentes perspectivas, así como planteamientos y métodos de análisis, algo que es sumamente complejo e interminable.

Debido al reducido espacio que ofrece un artículo, evito profundizar al respecto y me permito a su vez resarcir la falta haciendo mención de algunas ideas de Foucault, que sugieren una Teoría de la dominación que analice “la relación de la dominación en lo que tiene de fáctico, de efectivo y ver cómo es ella la que determina los elementos sobre los que recae”.


En consecuencia, no preguntar a los sujetos cómo, por qué y en nombre de qué derechos pueden aceptar dejarse someter, sino mostrar cómo los fabrican las relaciones de sometimiento concretas. Segundo, se trataría de poner de manifiesto las relaciones de dominación y dejarlas valer en su multiplicidad, su diferencia, su especificad o su reversibilidad, no buscar, por consiguiente, una especie de soberanía fuente de los poderes; al contrario, mostrar cómo los diferentes operadores de dominación se apoyan unos en otros, remiten unos a los otros, en algunos casos se refuerzan y convergen, en otros se niegan o tienden a anularse. (Foucault, 2002:p.51)

Mas no por tales facetas propias de la lucha por el poder ha de soslayarse o restar méritos democráticos a la inconformidad civil que una vez convertida en protesta pública, sea como marcha, plantón, mitin o cualquier otra manifestación legitimada por la acción colectiva dentro del marco constitucional, busca ser socialmente visible como condición que le permite enviar mensajes o lograr uno o varios propósitos, definidos muchas veces en pliegos petitorios o consignas que resumen una visión de lucha contra el sometimiento. “En este sentido, un movimiento social es aquel tipo de acción colectiva que cuestiona la historicidad, es decir, el núcleo sociocultural del orden establecido, o sea, las instituciones y los valores del Estado capitalista y del mercado, en el caso de las sociedades capitalistas tradicionales, y del monopolio de la información en la sociedad posindustrial”. (Olvera, 2003)

Antes de volverse interlocutores cuestionados o cuestionables, es decir, en el momento previo a que les impregne cierto aire de duda y por tanto se cuestione si llegaron a pactar acuerdos en forma unipersonal (el simple diálogo con la contraparte los puede hacer ver como tales, máxime cuando los ánimos se hallan alterados por el choque frontal de intereses entre representantes del régimen o el Estado y de los sectores que demandan atención y acción gubernamental) por lo regular quienes generan los movimientos civiles que se forman de manera espontánea, como rápida respuesta ante abusos de autoridad u otro móviles, mantienen cierta autoridad moral en cuanto al espíritu que los instila, por lo que asumen la investidura de líderes que dirimen una legítima búsqueda de acatamiento sobre exigencias concretas que pueden ser desde iniciativas de ley, hasta remoción de funcionarios que se les comprueben ilícitos, actos denigrantes o abiertamente criminales.

De acuerdo con lo que anota James C. Scott en su libro “Los dominados y el arte de la resistencia”, (2004.p.32) “Un individuo que es ofendido puede elaborar una fantasía personal de venganza y enfrentamiento, pero cuando el insulto no es sino una variante de las ofensas que sufre sistemáticamente toda una raza, una clase o una capa social, entonces la fantasía se puede convertir en un producto cultural colectivo”.

Las marchas o las “caravanas” como la que hizo el recorrido hace unos días a través de varios estados del norte de México, constituyen, según este ángulo de análisis, acciones políticas desde la sociedad civil que se llevan a cabo sin que llegue a ser esta representada. La reciente actividad ciudadana conocida como “Caravana del consuelo”, difiere además de otras que pretenden influir sobre el sistema político “apelando a la crítica, a la movilización y al convencimiento”, mismas que tampoco logran trascender de manera significativa.

Sin tener elementos como para descifrar qué pretende este agente social, sobre lo que obtuvo de la entrevista con el presidente, lo que resulte será una forma más de representación que asumen determinados actores para sí mismos y para aquellos a quienes suponen en igualdad de circunstancias. La sociedad civil como tal es irrepresentable. Olvera nos explica las razones:


Naturalmente, esta forma de acción es limitada y poco eficiente, pues por definición construye escenarios múltiples, tantos como diversos sean los actores e intereses en juego. (…) Los componentes gremiales de la sociedad civil (sindicatos, asociaciones patronales y profesionales, organizaciones campesinas, organizaciones de colonos, pobladores urbanos) reclaman la representación de los intereses económicos de sus miembros, pero no tienen la legitimidad (en una época tendencialmente poscorporativa) para reclamar la representación política de los mismos. Las asociaciones culturales, deportivas y recreacionales no tienen vocación alguna por la representación de intereses, siendo como son, asociaciones privadas. Las asociaciones civiles tipo ONG tampoco pueden reclamar representación alguna, pues si bien son asociaciones privadas con fines públicos, sus opiniones y propuestas tratan de influir en la opinión pública y en las políticas públicas a partir de criterios de eficacia y justicia y no de derechos sectoriales. Los grupos de derechos humanos y los movimientos sociales prodemocráticos tampoco reclaman una representación, sino que apelan a la aplicación real de los derechos ciudadanos en general por motivos de moralidad pública. Las asociaciones religiosas también son de carácter privado. Es por ello que la sociedad civil en cuanto tal, es irrepresentable en términos convencionales. (Olvera, 2003:p. 32)


El personaje que figura como líder de la llamada “Caravana del consuelo”, rechazó ser asociado con otras resistencias o luchas civiles, y dio razones por las cuales no es pertinente que dicho movimiento civil fuese relacionado con cualquier clase de corriente u organización política ni de carácter alguno. Se trata simplemente de un llamado a la sociedad civil para hacer un reclamo conjunto. Vuelvo a Olvera para explicar cuál ha sido la visión y la estrategia de quien ante todo se define como poeta.

Sólo en un terreno altamente simbólico y en coyunturas extraordinarias la “sociedad civil” puede reclamar una representación moral colectiva: en campañas contra las dictaduras, contra la delincuencia, contra la violación de los derechos políticos, contra la impunidad de la clase política, contra el hambre, por elecciones libres y equilibradas, por los derechos indígenas, por la paz, por una vida digna. Fuera de estas circunstancias, que un grupo, red o sector de organizaciones civiles reclame una supuesta representación de la sociedad civil es un error político que puede traer serias consecuencias. (Olvera, 2003:p. 32)

Pese a este propósito expuesto por el señor Sicilia, el reclamo quedó lejos de una representación moral suficientemente amplia, debido quizá a la forma en la que se dio el acercamiento de este actor con el gabinete presidencial, casi en tono coloquial e inclusive amistoso. Se terminó demasiado aprisa con una expectativa sumatoria que pusiera en juicio político al ejecutivo y su estrategia bélica y policial. Se escindió así de golpe la iniciativa, quedando únicamente el poeta y algunos seguidores frente a la opinión pública. Ahora falta que explique cuál va a ser la siguiente acción y qué pretende lograr, ya que se ha desmarcado de las peticiones elaboradas en las mesas de trabajo que se efectuaron en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez. Por cierto se muestra como un actor político más en la escena y por lo visto tiene experiencia en ello, participó en las mesas de negociación en Chiapas cuando el conflicto Zapatista, además de alguna intensión que no es todavía suficientemente clara, a no ser que derive en un nuevo partido político o en la adhesión a algún movimiento de los que han surgido en años recientes.

Nuevamente transcribo algunas ideas de Castells, que ayudan a enfocarnos sobre algo que pudiera ser indispensable para ser tomado en cuenta a la hora de convocar a la gente a que deje sus rutinas habituales y preste su presencia en actividades civiles que demandan la fuerza de la reunión:

Resistirse a la programación e interrumpir las conexiones para defender valores e intereses alternativos son las formas de contrapoder que ejercen los movimientos sociales y la sociedad civil - local, nacional y global – con la dificultad de que las redes de poder son normalmente globales mientras que la resistencia del contrapoder suele ser local. De qué forma alcanzar lo global desde lo local, mediante la conexión en red con otros lugares, cómo arraigar el espacio de flujos, es la cuestión estratégica clave para los movimientos sociales de nuestro tiempo. (Castells, 2010: p.84)

¿El espontáneo dirigente social representa mucho menos que hace tres semanas, cuando dio a conocer su plan? ¿Por qué marchó entonces y por qué le acompañaron los demás? ¿Por qué marcha la gente hoy en México, y por qué no?

Para concluir comparto estas reflexiones aristotélicas cuya vigencia se mantiene intacta.
ARISTÓTELES, POLÍTICA (1253A):
"Según esto es, pues, evidente, que la ciudad-estado es una cosa natural y que el hombre es por naturaleza un animal político o social; [....] Y la razón por la que el hombre es un animal político (zôon politikón) en mayor grado que cualquier abeja o cualquier animal gregario es evidente. La naturaleza, en efecto, según decimos, no hace nada sin un fin determinado; y el hombre es el único entre los animales que posee el don del lenguaje. La simple voz, es verdad, puede indicar pena y placer y, por tanto, la poseen también los demás animales -ya que su naturaleza se ha desarrollado hasta el punto de tener sensaciones de lo que es penoso o agradable y de poder significar esto los unos a los otros-; pero el lenguaje tiene el fin de indicar lo provechoso y lo nocivo y, por consiguiente, también lo justo y lo injusto, ya que es particular propiedad del hombre, que lo distingue de los demás animales, el ser el único que tiene la percepción del bien y del mal, de lo justo y lo injusto y de las demás cualidades morales, y es la comunidad y participación en estas cosas lo que hace una familia y una ciudad-estado."


BIBLIOGRAFÍA


CASTELLS Manuel, (2010) “Comunicación y poder”. Alianza Editorial. Madrid. P.84.

FOUCAULT Michel, (2002) “Defender la sociedad”. Fondo de Cultura Económica. México. P.51.
OLVERA Alberto J. (Coordinador) (2003) “Sociedad civil, esfera pública y democratización en América Latina: México”. Fondo de Cultura Económica, México. Pp.31-32

Scott James C. (2004) “Los dominados y el arte de la resistencia”. Discursos ocultos. Colección Problemas de México Ediciones Era. P.32.

viernes, 24 de junio de 2011

El fraude de 2006, los medios de comunicación y el escenario de 2012.

Cada vez que se hace mención del aparatoso fraude electoral que puso a gobernar a quienes ya se les puede culpar de la severa crisis en que se encuentra sumido el país, yo me repito la pregunta: ¿por qué la gente se deja influenciar de forma tan sumisa por las campañas de los medios de comunicación? ¿Qué hubiera sucedido si se controlara la propaganda electoral y no se hubiese permitido la invasión de anuncios en contra de la imagen del candidato más fuertemente posicionado en dicha contienda? ¿Hubiera triunfado la candidatura de López Obrador y con ello el panorama social y político sería muy distinto?

Con la elección de Fox y de Calderón, quedó demostrado que los procesos electorales ya son asunto casi exclusivamente de los medios de comunicación, principalmente las televisoras y cadenas de radio que monopolizan los circuitos por donde fluye y se presenta la información. Estas agencias fueron reiteradamente señaladas como responsables de instalar el miedo como estrategia comunicativa, gracias a que una elite de empresarios se empeña en conservar sus privilegios a costa de lo que sea, ya que éstos no son nada despreciables, como por ejemplo la exención de impuestos. De acuerdo con Castells, “La capacidad para lograr el consentimiento o al menos instilar miedo y resignación respecto al orden existente es fundamental para imponer las reglas que gobiernan las instituciones y las organizaciones de la sociedad”.

En el imaginario político de los mexicanos se resume la visión sobre la alternancia como un simple cambio de mandos, que no llega a tocar las estructuras, ni tampoco permite que se reformen o alteren sustancialmente las relaciones de poder.
Sin dedicar mayor razonamiento cuando se le interroga sobre su opinión acerca de las ofertas políticas, es común que la gente responda que le de da lo mismo quien gane o hasta por quien emitir el sufragio. La decisión se dificulta o de plano se abandona la intención de votar porque finalmente desde esta postura se percibe que, quien resulte triunfador en la contienda hará lo mismo que el anterior, auque fuese de distinto partido.

Por otra parte, en los niveles superiores de toma de decisiones del ámbito nacional pero también en las cúpulas del poder trasnacional, no se concibe que llegue a gobernar alguien que lleve a cabo cambios profundos siempre y cuando éstos resulten benéficos para las mayorías. Tal posibilidad sería en primer término anticlimática para el guardián de México, que ancla su poderío en cualquier nación que muestre flancos débiles como la nuestra, que los tiene debilitados en su totalidad.

Y si, es muy importante que la gente, al menos la que tiene interés en acudir a las urnas, tenga una noción definida sobre el programa político que presentan las distintas opciones partidistas. Es necesario que la sociedad conozca que el operativo que se montó a nivel Estado en contubernio con grupos empresariales, el clero, entre otros, para impedir el triunfo de López Obrador, trajo como consecuencia un país militarizado, con un régimen apoyado en el uso de la fuerza como única respuesta ante la grave crisis que amenaza a las instituciones, a la sociedad civil y a la viabilidad misma del país.

Aún no se sabe con certeza quienes irán a la contienda en 2012, y cuando esta información sea del domino público, lo ideal será recordar lo acontecido en 2006, para evitar que se repita.

Sin embargo, eso no es todo ni tampoco lo peor: Ha comenzado una imparable fuga de capitales al extranjero que posiblemente lleven a tomar medidas que devalúen el peso, trasladándolo de la línea de flotación actual que alcanzó hoy 12 pesos, a una por encima de los veinte pesos por dólar.

“Resulta que la exportación de capitales mexicanos crece a paso veloz, y en este sentido los mexicanos con mayor capacidad económica enviaron más de 93 mil millones de dólares al exterior durante el gobierno en curso para ser depositados en bancos, como inversión directa o para su colocación en otros activos en diversos países, indican informes del Banco de México. El envío de recursos al exterior bajo estas tres formas significó que 94 de cada 100 dólares que ingresaron a México por las remesas de mexicanos que trabajan en el exterior volvieron a salir del país en el mismo periodo. El monto de las remesas fue de 98 mil 801.6 millones de dólares en los 17 trimestres transcurridos entre 2007 y 2011 (La Jornada, Juan Antonio Zúñiga).

Acción Nacional no fue ni mucho menos, la respuesta al deterioro que sufre la nación en todos los órdenes. Las élites del partido vieron con buenos ojos algo que ya venía construyendo el PRI: la derechización del país. Por tanto continuaron la tarea sirviéndose de paso con los jugosos beneficios del poder.

Hoy que las expectativas de conservar el enorme privilegio de gobernar un país moldeado por la corrupción, se ven amenazadas por la movilización de la sociedad en varios frentes y con distinta estrategia, los grupos oligárquicos tratan de mantenerse a toda costa. Para ello seguramente preparan otro golpe a la democracia. Estemos atentos.

miércoles, 22 de junio de 2011

La crisis en México

Si bien tiene fundamento la tesis de que los problemas de cada país no son de su exclusividad, dado que la gran mayoría forman parte de un concierto capitalista global, que por demás está decir que ha entrado en una trepidante crisis, en mucho, lo que se resuelva o no, es algo que compete en primer término a los responsables del gobierno, de la administración pública y de los grupos que influyen en la toma de decisiones de cada nación.
Hace meses fuimos testigos de que el mundo financiero se cimbra, los capitales que viven del capital, es decir el mercado del dinero, entraron en una fase que muchos describen como terminal, donde el exceso de oferta destruyó la demanda generando más pobreza y desigualdad. Tan sólo en América Latina, donde las medidas de ajuste estructural y de estabilización económica prescriptas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) hundieron a la población en la miseria, la cantidad de pobres se duplicó entre 1980 y 2001 pasando de 120, a 220 millones.
Desde que fueron abandonadas o francamente despreciadas las políticas sociales y quedó la economía bajo la égida del Banco Mundial (BM) y el Consenso de Washington de los años 1980-1990, cualquier consideración ligada a la asistencia o ayuda social, aquello que se entiende como compromiso presupuestario hacia el pueblo, al igual que toda medida redistributiva, han sido fuertemente atacados, siendo los propios gobernantes, quienes repuntan este modelo emblemático del capitalismo moderno y ponen todo el aparato del Estado a su servicio. Por supuesto que la agudización de la crisis actual tiene que ver además con presiones o intereses mancomunados con los lobbies del país vecino, que a últimas fechas ha presentado síntomas de pérdida de liderazgo entre las naciones, principalmente en Europa y no se diga ante China, nación cuyo poderío industrial y comercial se hace evidente por medio de una expansión mundial que cada día es más importante en Latinoamérica.
Esta y otras situaciones adversas han obligado a que Estados Unidos reaccione en la forma acostumbrada, utilizando la ley del garrote, lo cual agudiza la problemática mexicana junto con las dificultades que muestran los gobiernos para entenderse con sus pares, a pesar de que en las tres décadas recientes han sido complacientes hasta la abyección, para cumplir con los dictados estadounidenses, principalmente en materia económica, migratoria y de seguridad. La sujeción del país por parte del Consejo de Washington nos priva por ahora de cualquier independencia económica y política. La manera como se formuló y se lleva a cabo el TLC y el Plan Mérida, son ejemplos claros.
Es importante también señalar que al depender los Estados Unidos de las drogas, tanto a niveles de consumo como del negocio que éstas ofrecen, su “socio comercial” México, tiene que jugar un triple rol bastante complejo como proveedor, puente y justiciero de quienes operen por fuera del círculo protegido por ambos gobiernos. Eso explica los más de 40 mil muertos relacionados con esta política de Estado, en lo que lleva la administración de Felipe Calderón, más lo que se sumen de aquí a que sea relevado del cargo.
La severa crisis no es otra cosa sino la consecuencia de sucesivos gobiernos cleptócratas, conformados por gente acostumbrada a servirse del poder, por ínfimo que sea, sin la menor consideración hacia gobernados. Cualquier puesto en los tres niveles de gobierno en México, es entendido como sinónimo de oportunidad. El Estado es percibido como una gran agencia de empleos y negocios a la cual los dos regímenes surgidos de la pseudo transición democrática, impusieron su propia dinámica con la misma fórmula de: a mayores escrúpulos menores posibilidades de hacer fortuna. Por su parte los partidos en lugar de tener desarrollo para favorecer la calidad de la democracia, se revelan como instituciones que enlistan gente ávida de llegar a cualquier cargo de la función pública, a costa de lo que sea y después disfrutar los beneficios de ese golpe de suerte. El pueblo expresa una sentencia que al respecto dice: “a mi no me den, sino pónganme donde haya”.
Igualmente aquella frase porfiriana de “más administración y menos política”, hoy pudiera ser sustituida por “más concentración del poder y menos política”.
Así se inscribe nuestra realidad como nación subdesarrollada que en ocasiones retrocede en la práctica democrática.